La patria de los pepinos es India, o más bien sus zonas de bosques tropicales. El pepino es una cultura caprichosa y exigente, no le gusta el clima frío y caliente, así como las fluctuaciones repentinas de temperatura, prefiere crecer en condiciones de suficiente humedad en el suelo y en el aire. Si no se cumplen estas condiciones, las plantas vegetales, bajo estrés, producen una sustancia especial para neutralizar el estrés: la cucurbitacina. Esta sustancia se encuentra en la cáscara del pepino cerca del tallo mismo, y también es la causa del amargor de la fruta.
Las principales razones por las que los pepinos son amargos.
- Hay variedades de pepinos que pueden tener un sabor amargo debido a la herencia de cultivos anteriores transmitidos a través de semillas.
- Violación de las reglas de riego, cuando las plantas reciben agua en exceso o en escasez. Es necesario regular los volúmenes de agua de riego.
- Condiciones climáticas y meteorológicas cuando las fuertes lluvias crean un exceso de humedad.
- Luz solar directa durante mucho tiempo durante el día, luz solar excesiva. Se recomienda colocar lechos de pepinos entre las plantaciones de maíz para crear un poco de sombra.
- Aire seco y poca humedad, especialmente durante veranos secos y calurosos. La pulverización de agua adicional vendrá al rescate.
- Nutrición inadecuada y cantidades inadecuadas de algunos nutrientes. Las plantas necesitan fertilización y fertilización, que contienen nitrógeno y potasio.
- Al recolectar semillas, es necesario tomar semillas solo de la parte delantera y media de la fruta. Las semillas que están cerca del tallo pueden causar amargura en futuros pepinos.
- El riego de los cultivos debe realizarse directamente debajo de la raíz de cada arbusto, especialmente en la etapa de formación del ovario. Durante los días calurosos de verano y los períodos secos, se requerirá humedecer la parte de la hoja: lavar con agua de una regadera o rociador.
- La apariencia de amargura en las frutas puede aparecer ya en la cosecha, cuando los pepinos se cosechan de manera incorrecta, con daño y torsión de las pestañas del pepino.
- Un cambio brusco de temperatura (calor extremo y una ola de frío brusco).
Los pepinos amargos se pueden comer de forma segura pelados. Al mismo tiempo, se conservan el aroma, el crujido y el sabor, sin embargo, se cree que todas las vitaminas y elementos útiles se encuentran en la cáscara. El amargor de la fruta desaparece durante el tratamiento térmico, por lo tanto, estas frutas también son adecuadas para encurtir, salar y enlatar.
Años de pruebas de reproducción han dado sus frutos tanto literal como figurativamente. Se han desarrollado variedades híbridas de pepinos que nunca tienen un sabor amargo (por ejemplo, Liliput, Harmonist, Egoza, Schedrik y otras), sus frutos tienen un sabor dulce y un aroma agradable. Sin embargo, tales variedades no se pueden usar para preparaciones de invierno.
Reglas para cultivar pepinos dulces sin amargura.
- Al cultivar pepinos en un invernadero, debe cuidar la iluminación completa y un régimen de agua estable.El riego debe realizarse con regularidad y el nivel de humedad debe mantenerse aproximadamente igual.
- El agua de riego debe estar ligeramente tibia. Se recomienda regar solo con buen tiempo por la mañana o por la noche.
- Con un cambio brusco de clima y con fluctuaciones de temperatura, las camas de pepinos al aire libre deben cubrirse con un material de cobertura especial y dejarse hasta que se calienten.
- No se recomienda utilizar estiércol fresco como aderezo. La introducción de dicho fertilizante contribuye a un mal almacenamiento de la cosecha y provoca la aparición de amargor en la fruta.
- Al elegir un lugar para camas con pepinos, no se recomienda utilizar arcilla pesada y suelo arenoso que se desmorona.
- El suelo de las camas de pepino no debe secarse; es necesario mantener su humedad moderada constante.
Si sigue todas las recomendaciones y reglas, puede cultivar pepinos dulces y fragantes, tanto en condiciones de invernadero como en campo abierto. Hay que recordar que el pepino es una cultura delicada y caprichosa que reacciona a los más mínimos cambios y violaciones del régimen de mantenimiento.